FITOTERAPIA
Fitoterapia
Hay diferentes factores que intervienen en el contenido de los principios activos de las plantas y, por tanto, de sus las propiedades medicinales:
- Tipo y lugar del cultivo.
- Tiempo de recolección (estación, día/noche, hora).
- Forma de secado.
- Forma de conservación.
Las plantas medicinales se toman de diversas formas la más antigua es la tisana que pueden preparar de tres maneras diferentes, en función de la parte de la planta que se quiera usar:
- Infusiones
- Decocciones
- Maceraciones
Otras preparaciones orales que se pueden hacer con plantas medicinales son:
- Jarabes. Se pueden preparar con infusiones o decocciones, según la planta, mezclándola a partes iguales con miel o azúcar candi.
- Polvos. Se usan en el caso de las plantas que tienen un gran poder remineralizante
- Vinos. Se preparan poniendo a macerar las hojas o las frutas en vino.
Hay diferentes tipos de preparados de plantas medicinales, y cada uno se tiene que tomar de una manera:
- Las gotas de extractos fluidos: añadir agua.
- Las tinturas: con agua en abundancia.
- Las cápsulas: tomar un vaso de agua como mínimo.
- Los aceites esenciales: tomarlos siempre con prescripción médica, y disueltos con un terrón de azúcar, o deshechos en infusión, pero nunca solos.
La fitoterapia es la ciencia que estudia el uso de las plantas medicinales y sus derivados con finalidad terapéutica. Es una práctica que se ha utilizado desde la antigüedad y durante mucho tiempo fue el único recurso del que disponíamos los médicos. Durante siglos se ha profundizado en su estudio de sus propiedades medicinales y todas las civilizaciones ( egipcios, griegos, romanos ) las han usado para el tratamiento de las enfermedades.
Mucho de este conocimiento y su utilización ha llegado hasta nuestros días y gracias a la investigación científica actual se han podido ver como actúan en el organismo.
En su preparación pasan por un alto control de calidad antes de su envasado y cada vez más los estudios que avalan el uso en numerosas aplicaciones médicas. Debido en parte a su gran difusión a través de la red y un mercado creciente de lo ecológico, existe una gran demanda y un riesgo de automedicación. Hay que tener en cuenta que las plantas tienen unos principios activos que tienen unas indicaciones para tratar determinadas patologías , pero pueden interaccionar con otros fármacos que tome el paciente y sólo un médico está capacitado para poder prescribirlos como indicación terapéutica segura.